Hasta abril habrá agua en los canales de riego del río Colorado
Se llevarán a cabo irrigaciones alternadas entre los principales canales de Corfo. Principalmente se utilizará el agua para el llenado de las napas y de las aguadas.
Fortalecer las napas, llenar las aguadas y, si es posible, permitir que algunos productores puedan darle algún riego más a sus campos con cebolla. Ese es el objetivo que se persigue desde la Corporación de Fomento del río Colorado, para extender durante algunas semanas más el período de irrigación de los campos ubicados al norte de Patagones y en el sur de Villarino.
Oficialmente, como ya se había anunciado, el primer corte se dio algunos días atrás, el 28 de febrero, pero hasta los primeros días de abril el agua seguirá corriendo por los miles de kilómetros de canales que comprenden sus redes primaria, secundaria y terciaria.
El plan que se anunció desde Corfo es simple: se llevará a cabo una alternancia entre los canales principales, que tendrá una duración aproximada de 15 días para cada uno de ellos. En estas fechas el turno es para el que abastece a Mayor Buratovich y después será el momento del de Villalonga y, por último, el Unificador III que dota de agua a la zona de Pedro Luro.
Los caudales, claro está, irán en descenso. Desde el dique Casa de Piedra, a fin de febrero, ya se bajó la entrega de 80 metros cúbicos por segundo a la mitad, con la idea de llegar al 7 de abril con 25, para en es momento bajar a 15. La dotación pasará de los 0,3/0,35 metros cúbicos por segundo en cada boca, a entre 0,27 y 0,28.
A partir de ese momento comenzará el real período de corte, durante el cual se prevé llevar a cabo diversas obras de recubrimiento de canales con poliéster y geomembrana, para reducir las pérdidas por filtración. En el mientras tanto, se irán mirando de reojo los pronósticos de nevadas en las altas cumbres para determinar en qué situación se encontrará el sistema en agosto, cuando debería comenzar la temporada de riego nuevamente.
Esta situación, se apuran a aclarar desde el ente de riego, no significa que la escasez hídrica sea un mal recuerdo. De hecho, esta temporada de irrigación es la más corta de la historia; y si no hubiese sido por una nevada salvadora ocurrida a mediados de agosto pasado, hubiese terminado a mediados de enero, haciendo imposible el cultivo de cebolla.
(LaNueva)
