La recomendación es abastecer internamente, aguantar y generar nuevos mercados externos

Justamente el avance de Brasil en un desarrollo tecnológico y comercial muy fuerte, ha hecho que cada año se esté exportando menos, debido a que han logrado por momentos el autoabastecimiento. “Es un poco una competencia, pero la idea de encontrarnos es conocer las cuestiones de la demanda, es decir, en que momentos podemos cubrir esa demanda, sobre todo por las cuestiones climáticas que poseen muchas regiones de Brasil que ocasionan problemas que afectan su producción” aseguró el técnico del Inta Hilario Ascasubi.

“Ellos han incorporado tecnología como riego por goteo, uso de híbridos, sistemas de siembra directa, por eso han logrado producir en regiones que antes era impensado y ofrecen mercadería en el mercado interno propio en la misma época que estamos ofreciendo nosotros”, reflexionó.

Ese avance de Brasil produce un impacto en la zona, que hasta ahora sigue siendo la mayor producción en el Valle de Corfo, con un promedio de 90 millones de dólares que se generan anualmente, números que van entre 60 a 140 millones dependiendo del precio. Esa producción está siendo afectada por la escazes hídrica que ha provocado una migración de muchos productores y por esta situación de menor demanda de Brasil. “A futuro la recomendación es ser muy prudentes en la cantidad de cebolla que tenemos que sembrar, si bien tenemos una participación muy marcada en el mercado interno- que debemos sostener-prácticamente son 6 meses, pero la exportación esta cada vez más comprometida”, reflexionó.

En general se destinaba un 40% a exportación y hoy se maneja entre un 25-30 % y el resto depende del mercado interno. “Es una situación compleja, hay que adaptarse y vender a nuevos mercados que no es simple, debemos conservar la infraestructura, los productores y el factor social que vive alrededor de esta producción, ese es nuestro mayor objetivo. Debemos diversificarlo con otros cultivos, papa, zanahoria, batata, ajo, para mantener la actividad económica y no depender solo del cultivo de cebolla”, alentó Iurmann.

En cuanto a nuevos mercados, “Paraguay ha crecido bastante, se está pensando en EEUU y hay un jugador importante que es Holanda que le vende a mas de 100 mercados y en la época que nosotros producimos hay fuerte demanda del norte de África, para eso dependemos de una logística que debemos desarrollar, tenemos costos comerciales muy elevados” se lamentó.

Por todo esto el técnico una vez más repite el mensaje “recomendamos no aumentar la superficie de siembra de cebolla, o mantenerla o reducirla, ya en Junio vemos que se está planchando el mercado y las perspectivas no son del todo favorables, tenemos que estar pensando que Brasil tenga un mercado climático muy adverso para pensar que ellos van a salir a comprar fuertemente y eso sería directamente poner nuestra siembra en cuestiones del azar”, finalizó.