INSEGURIDAD RURAL

Ingresan a un campo a punta de pistola “Nos robaron una forma de vivir en familia que teníamos”

Así lo expresó Diego Chiatellino, propietario del establecimiento "La Esperanza" en cercanías a la localidad de Bonifacio, partido de Guaminí, quien contó en primera persona lo vivido la noche del pasado jueves 4 de mayo donde le sustrajeron una camioneta Toyota Hilux y dinero en efectivo.

Sociedad 08/05/2023 Hora: 14:36
Ingresan a un campo a punta de pistola “Nos robaron una forma de vivir en familia que teníamos”
Ingresan a un campo a punta de pistola “Nos robaron una forma de vivir en familia que teníamos”

Al menos dos personas armadas ingresaron al establecimiento “La Esperanza”, un campo del distrito de Guaminí. Diego Chiatellino sufrió en carne propia junto a su mujer María Eugenia, este brutal episodio.

El hecho se produjo cerca de las 20:00 horas, dos sujetos armados asaltaron y maniataron al matrimonio, robando una suma de dinero y huyendo del lugar en su camioneta, una Toyota Hilux color gris modelo 2022. Finalmente el rodado fue descubierto por un vecino, quien encontró la camioneta abandonada sin ocupantes en un camino rural del distrito.

Desde SudOeste B.A. compartimos el testimonio de Diego Chiatellino, quien dialogó telefónicamente con nuestro colega de Radio Máxima Bonifacio, esta es la crónica en primera persona: 

...llegué a casa a la tardecita noche, estaba mi mujer Eugenia, entré a bañarme y estando en la ducha escuché un grito, al instante ingresó una persona con la cara tapada al baño y me apunta con un arma”. Sostuvo Diego, quien afirma “lo cuento y tiemblo”.

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Continuó narrando que cuando sale del baño y es dirigido al living de su casa, se encuentra que había otro sujeto armado que amordazó con una mano a su mujer y con la otra le apuntaba.

Chiatellino aclara que no puede contar los detalles, debido a que todo es materia de investigación, lo cierto es que consiguieron el objetivo de robar, llevándose la camioneta de su madre, ya que él tenía la suya en reparación luego de un choque. Además añade que por suerte en la vivienda cercana, la casa de su madre, se encontraba ella con menores, quienes no se enteraron ni vieron nada al momento que se produjeron los hechos, lo que pudo haber sido realmente mucho peor teniendo en cuenta la presencia de menores en la propiedad contigua y el grado de violencia que estos trágicos hechos representan. 

De su casa fueron hasta la oficina y una vez obtenido el botín escaparon. “Hubo un momento en que pensé lo peor, hasta acá hemos llegado” relató Diego. En cuanto al tiempo que duró el triste episodio indicó “deben haber sido 10 minutos”.

Al tiempo que escapan los malvivientes el propietario llama al 911, llega la policía y cercan el campo en busca de huellas, allí la pareja cuenta lo sucedido y luego van a declarar a la sede local. “Lo que vimos es que eran dos personas, supongo que hubo alguno más y alguno que vendió información” indicó. 

Según expresa Diego, su mujer María Eugenia tiene un fuerte golpe en la cabeza, aparentemente producto de un culatazo, si bien no sería nada grave, igualmente estuvo en observación médica. En cuanto a lo sucedido y lo que pudo haber sido, el damnificado relató: “entiendo que uno tiene que rescatar lo positivo en esto, que no haya pasado a mayores, pero es tal la impotencia que uno tiene y por ahora no lo tengo en cuenta, por ahí dentro de unos días sí”. 

En relación a las muestras de cariño de toda una comunidad que siente como propio el hecho delictivo Chiatellino fue categórico: “no puedo hablar mucho sobre este tema porque estuve llorando toda la mañana, (emocionado y con la voz entrecortada) estoy agradecido con toda la gente. Estoy muy agradecido, gente que conozco mucho y otra que no tanto, me han brindado muchísimas muestras de cariño, es increíble. La verdad que eso ayuda mucho. Más que el robo en sí mismo, nos robaron la forma de vivir que teníamos con toda la familia”.

En continuidad con este análisis de lo que representa el hecho, Diego agregó: “a todos los que vivimos acá (en el campo) esto nos va a cambiar, eso es lo que más te entristece, es una mezcla de impotencia con mucha tristeza,  la primer reacción que tuve es pensar en irnos, pero ahora no sé qué va a pasar, sabés lo que es llegar de noche al campo, o que alguien quede solo, ahora va a ser todo un tema, para nosotros y para mucha gente que vive en el campo o en los pueblos chicos como el nuestro también. Sería muy importante que esto se esclarezca para que no le sigan haciendo esto a otra gente”.

Por último Chiatellino cerró su relato diciendo: “Gracias a toda la gente por sus muestras de cariño”.

 

 

Por SudOeste B.A. con información de Radio Máxima Bonifacio

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