Hallan zapatos de niño de 2.000 años de antigüedad en las ruinas de Palmira, en Siria
Palmira fue una antigua ciudad ubicada en el desierto de Siria. En la actualidad, solo perduran sus amplias ruinas, foco de una abundante actividad turística internacional y de varios tesoros arqueológicos que nos ayudan a conocer el pasado.
La antigua ciudad de Palmira fue declarada como Patrimonio de la Humanidad en 1980. El 20 de junio de 2013, la UNESCO incluyó a todos los rincones sirios en la lista del Patrimonio de la Humanidad en peligro, como una manera de protegerlos y alertar sobre los riesgos a los que estaban expuestos por la Guerra Civil en el país.
El listado pretendía poner en valor las calles y las construcciones de lo que fue esta ciudad, que un día estuvo habitada por otras vidas cuyos recuerdos quedaron enterrados por el paso de los siglos. Aunque, de vez en cuando, hay hallazgos que nos hacen ser conscientes de que esa caducidad es una propiedad intrínseca en todos.
Como con el reciente descubrimiento en las ruinas de Palmira de un par de zapatos de niño romano con 2.000 años de antigüedad, un hallazgo que proporciona un contexto histórico valioso para la ciudad antigua y el Imperio Romano en general. Además, Palmira fue una vez una floreciente ciudad oasis en la Ruta de la Seda, centro vital de comercio y cultura en la época.
La ciudad prosperó bajo el dominio romano, beneficiándose de su ubicación estratégica. Los mercaderes de Palmira se involucraron en un comercio extenso, conectando el mundo mediterráneo con el este, lo que confirió a este lugar un carácter cosmopolita y le proporcionó su riqueza.
El descubrimiento de los zapatos nos permite echar un vistazo a la cotidianidad y la cultura material de los habitantes de Palmira durante este período.
Con los zapatos, los arqueólogos pueden obtener información sobre el diseño, los materiales y la artesanía que se empleaban a la hora de fabricar calzado romano en la antigüedad. Además, el hallazgo de estos zapatos es un testimonio de la importancia arqueológica perdurable de Palmira.
Las ruinas de la ciudad, incluido el icónico Templo de Bel, el Arco del Triunfo y el Valle de las Tumbas, han atraído a exploradores, eruditos e historiadores durante siglos. La presencia de objetos bien conservados, como estos zapatos, destaca la importancia de preservar y proteger los sitios del patrimonio cultural, incluso en tiempos convulsos como en el de una contienda bélica.
Estudiar estos zapatos dentro del contexto histórico más amplio del Imperio Romano permitirá a los historiadores reconstruir aspectos de la vida cotidiana, la moda y las normas sociales de la época.
(Cultura Inquieta)
