¿Qué pasa con el dique Paso Alsina? Entre la promesa y la incertidumbre
A pesar del potencial para transformar la agricultura de Villarino y la región, el proyecto del dique enfrenta obstáculos financieros y busca nuevas vías de financiación para su concreción.

El ambicioso proyecto del dique Paso Alsina, que promete revolucionar el manejo del agua en el río Colorado y beneficiar al municipio de Villarino, enfrenta un futuro incierto tras cuatro años de su anuncio. La falta de fondos ha frenado el progreso de la obra, que se estimaba estaría ya en fases avanzadas de licitación internacional para finales de 2023. A pesar de las promesas iniciales y el potencial incremento de 36 millones de dólares anuales en la producción agrícola local, la realidad es que el proyecto está en pausa.
Con la temporada de riego en el Valle Bonaerense del río Colorado llegando a su fin, el momento óptimo para iniciar construcciones se desvanece sin avances significativos. El ministro de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez, ha expresado la dificultad de encontrar financiamiento y la complejidad de la situación actual. Aunque se exploran alternativas como la colaboración con bancos asociados a los BRICS, no hay garantías ni plazos definidos para la reactivación del proyecto.
La situación es similar para otros proyectos en la región, como la impermeabilización de canales primarios de Corfo, que a pesar de contar con financiamiento internacional aprobado, enfrentan la incertidumbre de la llegada de los fondos. Rodríguez enfatiza la importancia de estas obras para la eficiencia del sistema de riego y mantiene la esperanza de confirmar los desembolsos necesarios para comenzar.
El dique Paso Alsina no solo mejoraría la gestión del agua en un 20%, sino que también ampliaría la superficie de riego en más de 25 mil hectáreas. La presa, con una longitud de coronamiento de 4.859 metros y una capacidad de 220,3 hectómetros cúbicos, ofrecería múltiples beneficios, desde la regulación de caudales hasta el fomento del turismo y la integración de la red caminera.
En medio de esta incertidumbre, el ministerio continúa luchando por el reconocimiento nacional de las declaraciones de emergencia y desastre agropecuario para distritos afectados por la sequía. A pesar de la falta de respuestas, Rodríguez se muestra optimista ante la cosecha 2024/2025, anticipando una recuperación y una buena campaña gracias a las lluvias recientes.
Este proyecto, que se alinea con la visión de mejorar la eficiencia hídrica y apoyar la producción agrícola, sigue buscando luz verde para su realización, manteniendo viva la esperanza de un futuro más próspero para Villarino y sus alrededores.