¿Dónde está el dinero? Mientras las tarifas subieron casi un 1500% en el gobierno de Milei, se producen faltantes de gas
El sistema energético no exhibe un cambio en la respuesta ante la elevada demanda a pesar de los aumentos acumulados.

La actual ola polar que azota el país ha vuelto a poner de manifiesto las profundas debilidades del sistema energético argentino. A pesar de un impactante aumento del 1482% en las tarifas de gas natural desde el inicio de la gestión de Javier Milei en diciembre de 2023, la infraestructura no logra responder a la elevada demanda, derivando en cortes de suministro y medidas de emergencia, que afectan incluso a hogares residenciales.
Un informe reciente revela que, a pesar de las drásticas subas en las facturas de gas, el Estado aún subsidia el 57% del costo del abastecimiento y la infraestructura no muestra mejoras que eviten las restricciones de servicio en los picos de consumo invernal.
Según cálculos del Observatorio de Tarifas y Subsidios IIEP (UBA-Conicet), el valor promedio de la factura de gas en Argentina ya ronda los $50.000 en junio, superando los $100.000 en algunas zonas, en contraste con los $5.000 promedio de diciembre de 2023 (con un máximo de $10.574).
Actualmente, un hogar de ingresos altos (N1) abona en promedio $61.220 mensuales. Para los usuarios de bajos ingresos (N2), la factura promedio es de $46.674, mientras que para los de ingresos medios (N3), asciende a $51.752. Las regiones con las facturas más elevadas, servidas por Camuzzi Gas del Sur, incluyen Tierra del Fuego, Santa Cruz Sur y Chubut Sur, donde los valores para hogares N1 pueden ir de $101.123 a $190.290, para N2 de $69.766 a $129.909, y para N3 de $82.693 a $158.775.
El reporte del IIEP para el sexto mes del año destaca que "en el invierno se incrementa el costo del gas debido a la introducción del Gas Natural Licuado (GNL) en el mix de abastecimiento". Pese a ello, la cobertura estatal sigue siendo mayoritaria: el informe indica que, "con los nuevos precios del gas PIST y las bonificaciones en el precio del gas otorgadas a los segmentos N2 y N3, la cobertura de costos de abastecimiento del gas natural indica que en promedio el usuario residencial abona el 43% mientras el 57% del costo de abastecimiento es cubierto por el Estado nacional".
Esta situación genera un contraste llamativo: la considerable suba de tarifas y la aún significativa cobertura estatal del costo del servicio no se condicen con una mejora visible en la respuesta del sistema energético. Por segundo año consecutivo bajo la gestión libertaria, se registran cortes en industrias y estaciones de servicio que cargan GNC, una mayor dependencia de la asistencia de buques de GNL y la interrupción del envío de gas a países limítrofes.
En esta oportunidad, la problemática se agravó aún más con el registro de cortes en hogares residenciales por baja presión en las redes de distribución, principalmente en Mar del Plata. Con este panorama, el efecto de los aumentos tarifarios en una mejora sustancial del sistema y, consecuentemente, del servicio, aún no se percibe en medio de los días más fríos del año.