EFEMÉRIDE

29 de Agosto: Día Nacional del Árbol

Un Día Como Hoy 29/08/2021 Hora: 11:26
29 de Agosto: Día Nacional del Árbol
29 de Agosto: Día Nacional del Árbol

En la República Argentina el principal impulsor de la actividad forestal fue Domingo Faustino Sarmiento (Presidente de la Nación de 1868 a 1874) que en un discurso subrayó: “El cultivo de los árboles, conviene a un país pastoril como el nuestro, porque no sólo la arboricultura se une perfectamente a la ganadería, sino que debe considerarse un complemento indispensable” y agrega: “La Pampa es como nuestra República, tala rasa. Es la tela en la que ha de bordarse una nación. Es necesario escribir sobre ella ¡Árboles! ¡Planten árboles!”.

La prédica de Sarmiento encontró eco treinta años después, cuando el 29 de agosto de 1900, el Consejo Nacional de Educación, en base a la iniciativa del Dr. Estanislao Zeballos, instituyó dicha fecha, en celebración al “Día del Arbol”, como una efeméride a fin de tomar conciencia acerca de la importancia de los árboles para el planeta y la necesidad de protegerlos y conservarlos

El árbol es parte de los bosques y selvas, integra escenarios naturales, acompaña al hombre en los caminos y embellece las calles, plazas y parques de las ciudades.

El Árbol Forestal argentino es el quebracho colorado chaqueño (Decreto 15.190 del 21-08-56) que no debe confundirse con la Flor Nacional que recae en el Ceibo (Decreto N°138.974 del 2 de diciembre de 1942).

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Los árboles y bosques nativos son esenciales para preservar la vida humana y de distintas especies. Ayudan a la mitigación y adaptación al cambio climático, purifican el aire, protegen los suelos, previenen inundaciones, dan sustento a la vida de las comunidades locales y contribuyen a la seguridad alimentaria y el desarrollo económico. Además, concentran más de la mitad de la biodiversidad terrestre -ya que albergan aves, insectos, reptiles y mamíferos- y son fuente de alimentos, agua potable, recursos medicinales y materias primas como madera, leña, carbón y fibras.

En Argentina, desde hace casi 13 años, está vigente la Ley 26.331 de Bosques Nativos, una herramienta imprescindible para planificar el uso de estos ecosistemas permitiendo equilibrar producción y conservación de la naturaleza.

La Ley de Bosques -fuertemente promovida desde la sociedad civil- modificó el escenario nacional de protección de bosques nativos y visibilizó la problemática y la importancia de la conservación de estos ecosistemas. Además, fomentó una disminución progresiva en la tasa anual de deforestación en la Argentina, estabilizándose en los últimos años.

Sin embargo, a pesar de contar con esta Ley, los bosques nativos de Argentina vienen sufriendo grandes modificaciones producto del cambio de uso del suelo para actividades agropecuarias, urbanísticas y viales. Desde el 2007, en Argentina se perdieron 3.500.000 de hectáreas de bosques nativos y con ellos todos los beneficios asociados. El ritmo promedio ha sido de aproximadamente 300.000 hectáreas deforestadas por año.

El 60% de los bosques nativos argentinos se encuentran en la región chaqueña, que ocupa 11 de las 23 provincias de nuestro país. El Gran Chaco es la ecorregión boscosa más grande de Latinoamérica después del Amazonas y ocupa también parte de Paraguay y Bolivia. Su riqueza e importancia radican tanto en su biodiversidad, su potencial productivo, como en las culturas que lo habitan y los servicios ecosistémicos que los bosques proveen a las poblaciones locales y del país. Pero debido al avance de la deforestación y conversión de sus ambientes naturales, hoy se encuentra entre los 11 lugares más deforestados del planeta. En Argentina ya hemos perdido el 30% de los bosques chaqueños.

El avance de la deforestación y conversión de los ambientes naturales para las actividades humanas ocasiona graves consecuencias sociales, ambientales y económicas, muchas veces, irreversibles. Necesitamos frenar la deforestación, ya que mientras continúe, seguiremos perdiendo árboles, bosques, culturas, biodiversidad, servicios ambientales y oportunidades de un real desarrollo sustentable.

En el Día del árbol reforzamos la necesidad de proteger los bosques y ecosistemas naturales, para protegernos también a nosotros mismos: conservarlos es esencial para preservar nuestra salud y nuestro bienestar. La implementación plena de la Ley de Bosques es una ventana de oportunidad para toda la sociedad, pero muy especialmente para los que viven en y de los bosques. Tenemos que estar a la altura de las circunstancias de la crisis ambiental y social mundial que estamos atravesando y tenemos los instrumentos legales, administrativos y financieros para ello. No podemos dejar pasar la oportunidad de consolidar la conservación y uso sustentable de nuestros bosques nativos cómo una real política de estado que trascienda las gestiones de los gobiernos.

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