Adiós a las políticas de Soberanía Alimentaria: El área de Agroecología desaparecerá de la órbita nacional
En 2020 Argentina ponía por primera vez en marcha una dependencia con foco en la promoción de una labor agrícola basada en la sustentabilidad. Tres años después la dirección que pretendía ser un puente entre universidades y agricultores llegó a su fin.
Cuando diseña la nueva estructura de la que sueña se llame Secretaría de Bioeconomía, el por ahora titular de Agricultura del gobierno de Javier Milei, el ex decano de la UBA, Fernando Vilella, tiene decidido eliminar la Dirección de Agroecología, un área específica dedicada a alentar y promover a quienes han decidido producir de modo diferente al convencional, rechazando el uso de agroquímicos y semillas transgénicas, promoviendo los mercados de cercanía y defendiendo la llamada “soberanía alimentaria”. “Agroecología como estaba no estará más. Porque la sustentabilidad estará en todas las áreas”, fue la breve explicación oficial.
De este modo, este movimiento alternativo de producción (que tiene componentes agronómicos claros, pero también una elevada carga ideológica) perderá la institucionalidad que había logrado en el Estado Nacional, a partir de designar por primera vez en la historia a un funcionario a cargo del tema, el agrónomo Eduardo Cerdá, largamente reconocido por ser uno de los históricos promotores de la agroecología local.
La breve historia institucional inició con la creación de la Dirección Nacional de Agroecología por Decisión Administrativa 1441/20, del 8 de agosto de 2020, que modificó la estructura del ex Ministerio de Agricultura. Sus funciones eran “intervenir en el diseño e instrumentación de políticas, programas y proyectos que promuevan la producción primaria intensiva y extensiva de base agroecológica, en todas sus escalas, con la participación de productores y/o sus organizaciones, articulando acciones con los gobiernos provinciales y municipales”; y “participar en la formulación de medidas de formación, investigación y extensión, para apoyar la transición hacia modelos productivos, de comercialización y de consumo de base agroecológica”.
Luego vinieron los pasos para atrás. Primero con la degradación de Agricultura efectuada con la llegada de Sergio Massa al gobierno, el área pasó a ser una simple Dirección. Ahora, con una nueva reforma de la estructura de la Secretaría de Agricultura, directamente será eliminada.
La agroecología, como corriente de pensamiento y acción agronómica visiblemente opositora al rumbo dominante en la agricultura argentina, perderá así la jerarquía institucional que había logrado en el gobierno anterior. Habrá que ver ahora qué sucede con esta temática dentro del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria), donde la agroecología ha logrado convertirse en un programa nacional de investigación y extensión.
Consultado sobre esta decisión de Vilella, Cerdá opinó: “la agroecologia estaba, está y va a seguir avanzando, los que la realizan saben y nos dicen que están mejor, desendeudados, tranquilos, que ven mejor su campo. En este tiempo que nos tocó estar gestionando la Dirección Nacional de Agroecología queríamos que eso se vea. Sabemos que el camino es la agroecología. Por la salud, la vida y el campo. ¡Gracias!”
Cerdá compartió un balance de su gestión. “Atendiendo a la responsabilidad primaria del área y a un diagnóstico inicial sobre la situación de la agroecología en nuestro país, se definieron tres ejes estratégicos de gestión: Visibilizar, promover y proteger los sistemas agroalimentarios basados en los principios agroecológicos en todo el territorio nacional”.
En ese balance, la Dirección de Agroecología se apoyó especialmente en el programa Cambio Rural, impulsando decididamente la conformación de Grupos Agroecológicos. “En sólo dos años, los grupos evidenciaron un crecimiento exponencial, superior al 400%”, informó Cerdá, ya que mientras que en 2021 existían 34 grupos de Cambio Rural agroecológicos y en transición, a diciembre de 2023 existen 66 grupos de Cambio Rural agroecológico, integrados por un total de 576 productores, y 125 grupos en transición a la agroecología, con un total de 1.095 productores. Todos estos emprendimientos “abarcan más de 200.000 hectáreas”.
Otra línea de trabajo fue infructuosa, o mejor dicho dependerá ahora del Congreso Nacional, ya que la Dirección nacional participó en la redacción de un proyecto de Ley de Fomento de la Agroecología, que fue presentado por el entonces Ministerio de Agricultura, a través de la Secretaría de Agricultura Familiar, y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (Mincyt). El expediente ingresado en la Cámara de Diputados lleva el número 2584-D-2021.
También quedó trunco un trabajo orientado a la creación de un sistema de registro, certificación e identificación de la Producción Agroecológica a nivel nacional, denominado “Sistema Nacional de Garantía de la Producción Agroecológica” (SIGAPA). La idea de este sistema era responder a una necesidad que tienen los productores agroecológicos, que no cuentan con un sistema de certificación de sus productos semejante al que rige para la producción orgánica. Y por lo tanto no puede dar certezas a los consumidores sobre sus prácticas productivas.
Balance de la gestión de Eduardo Cerdá al frente de la Dirección Nacional de Agroecología
(El Diario Nuevo Día)
