Reunión entre Kicillof y el Foro de Intendentes Radicales
En las últimas semanas hemos visto cómo se diluyen las líneas divisorias de fases propiciadas por el Gobierno de la Provincia. Una mirada para entender y compartir, desde el diálogo, una salida en comunidad.
El sistema de fases propuesto por la Provincia de Buenos Aires, tal como se publica en su página oficial (gba.gob.ar/actividades-por-fase), se ha flexibilizado, cómo mínimo. Las variables económicas y sociales han demandado una serie de autorizaciones que poco o nada tiene que ver con lo que allí se esgrime; el cuadro de actividades contempla un listado de más de 130 ítems.
En este marco, hoy la Provincia de Buenos Aires, tiene 43 municipios en Fase 2, 86 municipios en Fase 3 y 6 municipios en Fase 4. Repasar cada una de las actividades permitidas o prohibidas según su fase sería demasiado extenso, lo que sí podemos afirmar es que muchas actividades que no están permitidas en fase 2, según el cuadro citado, hoy están en plena actividad. El punto en cuestión no es poner el ojo en tal o cual actividad y aplicar una mirada panóptica del movimiento social. Sino tratar de entender y compartir cuáles son los parámetros utilizados para definir el estado de fases que se aplica hoy en territorio bonaerense.
Es en este sentido que el Gobernador Axel Kicillof, junto a la Ministra de Gobierno, participó de una reunión con integrantes del Foro de Intendentes Radicales, quienes presentaron alternativas para la aplicación del sistema de fases y poder así, encauzar un diálogo que permita actualizar y mejorar las normas restrictivas.
La presencialidad escolar, ha sido la vedette en la frontera de fases, entre la aplicación de la fase 2 y 3 se comenzaron a politizar las miradas. Hecho que le debe un capítulo especial a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Gobierno Nacional, hasta tal punto que la justicia debe dirimir esa autonomía que reza el nombre de la ciudad capital. En la provincia de Buenos Aires viene sucediendo una cuestión similar, a la cartografía que expresa los estados de fases y su correspondiente color, todos en rojo y su gama, debemos leer entre líneas, el color del oficialismo distrital y tratar de entender su postura respecto a presencialidad sí, o presencialidad por ahora no. Esto ha generado una paleta de colores que confunde a todos, niños y grandes.
Volviendo a la reunión y al diálogo generado entre el Gobernador y el Foro de Intendentes Radicales, cabe destacar que hubo acuerdo respecto a la importancia de las actividades educativas con el mayor grado de presencialidad posible, y sobre el esfuerzo compartido por lograr un equilibrio entre aspectos pedagógicos y sanitarios. También se resaltó el impacto positivo que tiene el progreso de la campaña de vacunación, lo que permite observar la mejora de indicadores sanitarios.
Los jefes comunales pidieron al Gobernador “contemplar, además del valor absoluto de la incidencia, en los municipios que están en fase 2, el comportamiento temporal de dicho indicador para permitir valorar la mejora o no del mismo”; también propusieron que los indicadores actuales tengan en cuenta las políticas de testeos y el registro de los casos en cada localidad, para así tener datos más fidedignos sobre la situación puntual de cada municipio.
“Estamos dispuestos a involucrarnos con todas las acciones posibles para que esta situación que atravesamos concluya con el éxito que todos deseamos. Por eso aportamos ideas y propuestas para que el actual sistema de fases pueda adecuarse, conforme los nuevos contextos, orientándolo a recuperar a la mayor brevedad posible las actividades cotidianas de nuestra vida en comunidad”, concluyeron desde el Foro.
En resumen, toda propuesta de diálogo y entendimiento debe ser celebrada, transparentar los mecanismos que rigen nuestras vidas es una obligación de cada representante de gobierno, sea de la coalición que sea y ejerza el cargo que sea. Los destinos de millones de personas están en juego, primordialmente desde la Salud, eso en pandemia no se discute, pero también desde una perspectiva educativa, económica y social.
(Erasmo Ruppel para Nuevo Día)
