ADOLFO ALSINA

En el marco de su 104º aniversario, llega el Primer Festival de Knishes de Colonia Lapin

Turismo 06/11/2023 Hora: 15:54
Fotos crédito: Colonia Lapin, Centro Cultural
Fotos crédito: Colonia Lapin, Centro Cultural

El Centro Cultural de Colonia Lapin, partido de Adolfo Alsina, organiza y convoca a participar del "Primer Festival de Knishes", el mismo se llevará a cabo el próximo sábado 11 de noviembre desde las 18:00 horas. 

En el marco de su 104º aniversario, que se celebra el 6 de noviembre, este evento propone disfrutar de una jornada en familia, en la cual se podrá disfrutar y conocer de la comida típica judía, a partir de la degustación de "Knishes" se hará un recorrido por su historia y su elaboración, además de cantina y patio de comidas. A su vez habrá música en vivo con el grupo Shleper Klezmer, Diego Mayer y artistas locales.

 

Compartimos dos posteos de la página de facebook de Colonia Lapin, Centro Cultural repasan la historia y el camino recorrido de su gente hasta llegar a concretar esta excelente propuesta.

 

Hoy, 6 de noviembre, celebramos el 104° aniversario de Colonia Lapin  

Es un camino extenso y muchas cosas por contar. Para esta ocasión, una breve cronología de por qué la colonia lleva el nombre de Eusebio Lapin.

PUBLICIDAD

1910 Nace en el Lote 22 la Colonia “Narcisse Leven”, Pcia. de la Pampa, cercano a la “La esmeralda”. Los campos eran asignados por la JCA (Jewish Colonization Association), asociación encargada de la emigración masiva de judíos desde Rusia y otros países de Europa del Este hacia colonias agrícolas en tierras financiadas por la misma.

1918 Eusebio Lapin, ingeniero agrónomo y director de la JCA, es enviado por el Barón Hirsch a visitar “La esmeralda”. Analiza la tierra poco fértil, declara que el suelo es improductivo, y decide enviar a 8 familias a los terrenos “de reserva” de la Colonia Barón Hirsch, Pcia. de Buenos Aires. El viaje de 125 km de una colonia a otra es recorrido en los famosos “carros rusos”.

1919 La colonia se establece. Se suman 2 grupos más de 20 familias cada uno. De inmediato, improvisan el primer centro cultural y biblioteca, en una de las casas de los primeros colonos. En agradecimiento a su fundador, se propone nombrar a la colonia con el nombre de “Colonia Lapin”, de manera extraoficial. En ese entonces, figura en los registros como “Phillipson Nº 3”.

 

¿Por qué celebramos del 1° festival de knishes en Colonia Lapin?

Esta idea surge a partir de la puesta en valor del Centro Cultural Lapin, y la necesidad de contar con un evento anual, posterior al festejo del centenario de la Colonia, que permita mantener activo el espacio, fomentando el encuentro entre residentes y no residentes, durante la organización previa y el evento en sí.

Seleccionamos una comida típica: el knishe, y decidimos organizar un evento anual que reúna a diferentes personas para celebrar una jornada donde se manifiesten diferentes expresiones. ¿Cómo sobreviven las recetas típicas a las distintas adversidades que atraviesa un pueblo? ¿Qué herramientas tenemos a mano para hacer que sigan vivas y no pierdan valor en estas épocas? Ante este interrogante, los festivales gastronómicos se presentan como una buena estrategia para generar en los participantes experiencias enriquecedoras que van más allá de la simple degustación de un bocadito típico. Reúnen una combinación de los saberes y sabores que forman parte de los hábitos alimentarios de una localidad dentro de un proceso histórico-cultural en relación directa con las tradiciones y herencias de una determinada región y las personas que allí habitaban.

Permiten tanto a los organizadores como a los asistentes conocer sobre la cultura y sus valores, fortaleciendo el sentido de pertenencia y el desarrollo del lugar. Esto favorece directa y orgánicamente al desarrollo de la colonia y su entorno, desde potenciar las relaciones entre las personas que habitan Lapin, y también, entre el lugar y los pueblos vecinos. Otra de las principales transformaciones sociales que conlleva activar el vínculo entre la gente que vive en el pueblo y la colonia, es consolidar una red viva de interacción en la región, nutriéndose mutuamente y motivando las ganas de hacer, de ser parte.

Por todo lo anterior, decidimos sumarnos a los festivales gastronómicos de la zona, generando un nuevo punto en esta red de culturas que habitan el sudoeste bonaerense, manteniendo viva la memoria colectiva a través de sus recetas.

Fotos de ayer y de hoy   comiendo en el CCL  

Aporte Solidario

Tu contribución nos ayuda a seguir construyendo un periodismo distinto de calidad y autogestión.
Contribuir ahora
Comentar esta nota